Han sido muchos los estudios e investigaciones que han tratado la siguiente pregunta ¿Pueden los peces sentir dolor?
Si bien, mientras unos investigadores se postulan en afirmar esta premisa, otros desmienten esa posibilidad. No hay una conclusión al respecto aunque las últimas investigación parecen declinarse por el sí.
Algunas investigaciones destacadas son contradictorias
James D. Rose, Profesor Emérito, Departamento de Zoología, Universidad de Wyoming concluye, que las funciones de percepción y la conciencia del dolor (Rose 2002, 2007; Rose et al. 2014), son imposibles para los cerebros de peces.
El 23 de Septiembre de 2019 se publicó, en una edición especial donde se trataban aspectos relacionados con el dolor, de la revista «Philosophical Transactions» de la Royal Society B, el mito de que los peces no sienten dolor está equivocado. Los estudios en peces han demostrado que la biología del sistema nociceptivo es sorprendentemente similar a la que se encuentra en los mamíferos.
Receptores del dolor en peces: Nociceptores
Los peces poseen la estructura necesaria para poder percibir el dolor en su cerebro. Son conocidos como Nociceptores los receptores que responden a estímulos nocivos.
El cerebro de los mamiferos disponen de dos sistemas separados, el sensorial y el emocional. Los peces parecen no tener sistemas distintos, pero estudios han demostrado que tienen estructuras similares.
Hay una vertiente que refiere que los peces son capaces de percibir el dolor y generar una respuesta, pero que la respuesta es refleja y no elaborada a nivel cerebral.
Al inocular ácido etanoico a una trucha, presenta comportamientos como hiperventilación o pierde al apetito. Sin embargo estos revierten cuando se tratan con morfina.
Elena Lara, Licenciada en Biología y doctora en Oceanografía.
Estrés en los peces
Se conoce que la hormona del cortisol sube si los peces son sometidos a ciclos de estrés.
Algunos comportamientos propios de los peces ante una exposición a una situación de estrés pueden ser saltar de forma repetida, alteración del ritmo respiratorio, perdida de peso, distensión abdominal, nado anormal, agresividad, estar cerca de la superficie o inmovilidad.
Para valorar si un pez esta sometido a una situación de estres es importante conocer las características comportamentales de la especie en concreto en un estado de normalidad.
¿Pueden los peces sentir dolor? Juegan con desventaja
En el humano podemos expresarnos de forma clara, mediante el lenguaje, indicar donde nos duele y que tipo de dolor es. Sin embargo los peces carecen de esta capacidad, por lo que hay que observar las respuestas comportamentales e interpretarlas.
No tenemos empatía hacia los peces, entre otras causas porque no se quejan, no gritan, no son capaces de comunicarse en el medio aéreo. En el medio acuático sí lo hacen; se comunican haciendo sonidos con las branquias, la vejiga natatoria, los dientes…